Cochinero politiquero Vol. 1: "El Perrediquero"

No se ustedes, pero a mi francamente comienzan a molestarme sobremanera los comerciales del IFE que proclaman que aún se puede utilizar la credencial de elector para las elecciones del Estado de México aunque sean teminación 03. Eso sólo demuestra una cosa, la poca afluencia de votantes que se espera en las casillas, lo cuál me lleva a hacer un breve y por demás espinoso recuento de los tres principales partidos políticos contendientes.
Comencemos pues por el PRD, partido que se proclama como la auténtica opción de izquierda del país, su candidato: nada más y nada menos que el señor "Santa Claus"  Encinas, fiel seguidor de Andrés Manuel López Obrador, quién sigue (y seguirá) llorando amargamente el robo de las elecciones presidenciales del 2006. 
Poco a poco el ahora ex-jefe de gobierno de Distrito Federal, se ha encargado de apoderarse a todas luces, de la dirección del partido;  el único resultado fue la atomización y división del partido, al grado de que algunas corrientes llegaron a contemplar la posibilidad de una alianza con el PAN.
Aunado a ello, encontramos a la flamante secretaria general, Dolores Padierna alias "la señora de las ligas" con todo y su marido el único y auténtico señor de las ligas René Bejarano. La señorona tiró por la borda la alianza con el PAN (por lo menos tuvo un poco de dignidad), pero sinceramente si viviera en el Estado de México no confiaría un voto al partido cuya secretaria general tiene un pasado tan turbio.
Se quejan del "Grupo Atlacomulco" pero ¿qué ofrecen ellos? Un iluso paquete de programas sociales estilo D.F. que provocará a la larga el aumento deliberado de los servicios básicos como sucede en la "ciudad de la esperanza".

Primer empleo, último empleo y publicidad engañosa

Dando lata de nuevo, ahora con un tema que a la mayoría interesa, el desempleo y/o empleo mal pagado.
Últimamente se escucha por la radio un comercial de dudosa reputación en el que se escucha la voz de una joven emocionada exclamando: "¡El Senado me hizo caso! ¡Habrá mayores oportunidades para nosotros los jóvenes! ¡Empleos bien pagados!" Cada vez que tengo la desagradable oportunidad de escucharlo, siento una rara sensación de enojo y revoltura de estómago, no es para menos.
Por experiencia digo que encontrar un empleo enfocado a lo que estudiamos es harto difícil (los que estudiaron Historia o alguna carrera de humanidades me entenderán). Muchos patrones piensan que como es primer empleo, no necesitamos prestaciones con el salario es más que suficiente. La mayoría de los chavos egresados terminan consiguiendo como primer trabajo, cuatro horas "nalga" en un mini-cubículo haciéndola de vendedores. En esta vida hay que rolarle de todo. Insisto, publicidad engañosa...
Luego, ¿Qué pasa con las personas con experiencia pero que no los contratan por la edad? Subió el empleo, a lo mejor pero ¿Qué clase de empleo? ¿Bajo que condiciones? Lo veo con mi papá todos los días, tiene 44 años y lleva un año sin trabajo. A las entrevistas que va le dicen: "nosotros le llamamos" o simplemente un "sólo se perciben comisiones". En los requisitos se lee: "No mayor de 35 o 40 años".
Con el sueldo de mi mamá de casi 6000 pesos, no alcanza porque precisamente está pagando un crédito inmobiliario, mis hermanos no van a escuelas privadas y el carro con el que contamos tiene la misma edad que yo... Mucha publicidad engañosa, pocas oportunidades y quejas es lo que acontece en "el país de no pasa nada" 

Carstens y "calderolandia"

Definase "calderolandia" como el país de no pasa nada, de "usted viva y no se queje", de "aquí no hay guerra, es combate contra el narco", de "buen empleo, bien pagado" y recientemente de "no hay escalada de precios"; frase recientemente dicha por el presidente del "afamado y bien ponderado" Banco de México, Agustín "el come-solo" Carstens.
En el país de no pasa nada, ahora este "gordinflón" nos sale con que muchos productos básicos han bajado de precio; se ve que el señor no come en la calle. Y es que pregúnten a mis padres, a otras familias si no hay escalada de precios, (el encuestador/entrevistador/individuo curioso, ¡se lleva una mentada de madre segura!). Comprar un kilo de huevo, un kilo de tortilla o 1/4 de carne se ha convertido en un verdadero lujo, lo cierto que los miserables salarios no alcanzan y la gente se ve en la necesidad de establecer otro tipo de estrategias de supervivencia en esta ciudad. Pero, como dicen por ahí, empecemos por el principio...
Los "gasolinazos" son el pan nuestro de cada día y de este combustible fósil dependen miles de negocios de abastecimiento productos. Añada usted las heladas que azotaron al norte del país, causantes de la pérdida de miles de cultivos y mezcle bien con el condimento: "hacer la comida me sale más caro". Cadena de eventos desafortunados que dan como resultado un caldo sustancioso de descontento.
Señoras y señores, ¡ha llegado el tiempo de las especulaciones! La Ciudad de México (históricamente dependiente del abasto externo) resentirá el aumento en Jitomate, tomate, chile, limón (todavía más), entre otras. Hay que apretar los dientes (ootra vez) y aguantar lo que viene. Calderolandia no existe y el gordo no lo entiende....

De gripes y políticas públicas

Escribo desde mi computadora, repleta de microbios por la gripe que me aqueja actualmente. La solución más fácil y rápida es la automedicación.
Como yo, existen miles de mexicanos que optan por la misma opción, comprarse un antigripal que alivie los síntomas aunque sea por unas cuantas horas. Hace casi 6 meses se anunció con bombos y platillos la prohibición de vender medicamentos antibióticos sin receta; esperando que la gente acudiera con su médico de cabecera y así evitar la automedicación.
El resultado fue una explosión en la compra de antigripales y expedición de recetas falsas en Santo Domingo, hasta cierto punto la gente ya sabe que antibiótico resulta eficaz para aliviar sus males. Aquí el riesgo radica en que ¡no somos médicos! No sabemos si lo que nos aqueja es un leve resfriado o algo más riesgoso para la salud.
Los señores que se sientan cómodamente en sus curules, no tienen en cuenta el viejo dicho "A grandes males, grandes remedios" las salidas fáciles no se hicieron esperar y es que lo grave de esta situación es el decadente sistema de salud, llámese "Seguro Popular", "IMSS", "ISSSTE", etc. Lo cierto es que no hay fondos, que la gran creación priísta de salud, el IMSS, está al borde de la quiebra y no puede ni siquiera cubrir eficientemente las pensiones. Del ISSTE, ni se diga, igual o peor.
La atención es mediocre, llena de papeleo, malos tratos y oficinistas comiendo tortas. Los médicos (no todos pero sí la mayoría) recetan lo mismo: Paracetamol cada 8 horas, para dolores crónicos: Diclofenaco, inflamación: Naproxeno; infección de la garganta: Amoxicilina o Ampicilina (si es muy fuerte ampolletas), para los malestares de gastritis: Raniditina, para la tos: Ambroxol y así podría seguir pero con esas es suficiente.
Uno recurre al médico para que le recete lo de siempre y para ahorrar las molestas situaciones de las clínicas públicas prefiere comprar lo que este al alcance ahorrando tiempo dinero y esfuerzo...